Lima, 13 de Agosto del 2020.-La estrategia de atención territorial Lima Te Cuida, de la Municipalidad de Lima, ya ha beneficiado a vecinos del Cercado, La Victoria, San Juan de Lurigancho y Comas, llevando ayuda humanitaria, servicios de salud, mercados itinerantes y atención psicológica a las zonas más afectadas por el COVID-19.
A través de un análisis geoespacial, que incluye el cruce de indicadores como la densidad poblacional, el hacinamiento en viviendas, la concentración de adultos mayores de 60 años y familias en pobreza y pobreza extrema, la comuna metropolitana determina qué lugares son los más vulnerables frente al coronavirus.
Una vez identificados, lleva iniciativas propias como Sanimercados y mercados móviles, para garantizar la aplicación de los protocolos sanitarios y evitar las aglomeraciones; Sanivías y Quintas Limpias, para capacitar a conductores del transporte público y desinfectar espacios comunes; y Manos a la Olla, para abastecer las ollas comunes.
Asimismo, mediante la campaña Salud en Tu Barrio, se realiza el descarte de COVID-19 y de comorbilidades asociadas a este, así como vacunaciones y otros servicios. Solo esta campaña ya ha beneficiado a 5,000 vecinos de la capital.
San Juan de Lurigancho y el Cercado: 6,900 beneficiarios
Bajo este formato, la comuna lleva a cabo intervenciones según la realidad de cada lugar. Así, se priorizaron dos zonas: Santo Cristo en Barrios Altos, Cercado de Lima (3,400 beneficiarios) y Tres Cruces y asentamientos humanos aledaños, en la zona de Huáscar, San Juan de Lurigancho (3,500 beneficiarios). A ambos lugares llegó la campaña Salud en Tu Barrio para entregar canastas con víveres de primera necesidad. También se orientó a los vecinos sobre la correcta limpieza y desinfección de espacios comunes y prevención del COVID-19, lactancia y lucha contra la anemia.
En el Cercado, además, se capacitó a mototaxistas y se desinfectaron paraderos; asimismo, se orientó a los vecinos sobre cómo desarrollar zonas de juego en casa para sus bebés, niñas y niños. Por su parte, en San Juan de Lurigancho, se capacitó a comerciantes de mercados; además, se trabajó con 26 ollas comunes para apoyarlas con el abastecimiento de insumos perecibles y se guió a 724 personas en el desarrollo de biohuertos.